El catalán Jaume Leiva y la vasca Oihana Kortazar ganaron la 48 edición de la clásica Behobia-San Sebastián, cuyos 20 kilómetros, endurecidos por la lluvia y el viento, fueron cubiertos por primera vez en su historia por más de 20.000 corredores.
La ausencia de potentes atletas extranjeros y el perfil de los mejores españoles fue un claro síntoma de que del trío catalán formado por Jaume Leiva, Marc Roig y Roger Roca saldría el ganador.
Dado lo abierto del pronóstico en la categoría femenina, tampoco fue una gran sorpresa la victoria de Oihana Kortazar, si bien ésta es una especialista en pruebas por montaña.
La matinal atlética resultó bastante fresca, con el termómetro entre los 7 y 9 grados, y la lluvia como compañera de los participantes en el trayecto entre la salida, en la zona fronteriza con Francia, y el centro de la ciudad donostiarra, donde la meta volvió a ubicarse en el Boulevard.
Las mejores perspectivas del Club Deportivo Fortuna se cumplieron. No sólo por el récord de la inscripción -alrededor de 25.500-, sino que, con las habituales renuncias sumadas a las retiradas, se rebasó la cifra de los 20.000 en el paso por meta.
También hubo una alta presencia de espectadores, a lo largo del recorrido y en el centro donostiarra, pese a lo desapacible de la jornada, también ventosa.
En lo deportivo, la carrera no tuvo gran historia. Jaume Leiva y Marc Roig tomaron la delantera antes del kilómetro 5. Los vascos Asier Cuevas -campeón de España de 100 kilómetros- y Alberto Revuelta les persiguieron infructuosamente y cedieron. Leiva se deshizo del marcaje de Roig y llegó a meta en 1.01:33 con una ventaja de casi minuto y medio.
Laura García y Claudia Behobide parecían destinadas a disputarse el triunfo, pero sólo fueron tercera y cuarta. La que fue en 2011 campeona mundial en carreras por montaña, Oihana Kortazar, se impuso en un tiempo de 1.14:45.
Una persona resultó con un traumatismo leve al caer el arco de meta sobre algunos corredores y un sector del público a causa de una ráfaga de viento.
En la llegada, después abrazarse al también catalán Marc Roig, el vencedor comentó que "correr esta prueba es una gozada, el público es todo un 10".
La ganadora, por su parte, reconoció: "mi crono no es de los mejores, pero estoy satisfecha".
Jaume Leiva, hijo de una jugadora de baloncesto, 29 años de edad y con residencia en la barcelonesa población de Sant Pol de Mar, corrió la Behobia-San Sebastián después de solicitar una excedencia laboral por dos años y tras superar en mayo una apendicitis.
Llegó al País Vasco con la etiqueta de campeón de España de medio maratón, título alcanzado en Tordesillas (Valladolid) en septiembre pasado al batir ampliamente a Chema Martínez y después de terminar en un modesto puesto el mundial de los 21,097 kilómetros celebrado en Bulgaria, donde, no obstante, fue cuarto mejor europeo clasificado con 1.05:36.
La mejor de las mujeres, es decir, del 17 por ciento de los más de 25.000 inscritos, la guipuzcoana Oihana Kortazar, es una atleta que reparte 51 kilos en sus 164 centímetros de estatura, números con los que ganó este 2012 los Sky Games más el campeonato español y la Copa de España de carreras por montaña.
El y ella, Leiva y Kortazar -a la distancia de 93 años de la primera edición de la carrera, allá por 1919-, suceden a los triunfadores del pasado 13 de noviembre de 2011, los etíopes Abraha M. Assefa y Tirhas Gebre.
La Behobia-San Sebastián, todo un gran referente del atletismo popular y para este sector probablemente la más esperada prueba del calendario, transcurrió sin tiempos récords -en poder de Alberto Juzdado (59:19) y Rocío Ríos (1.08:54)-, pero con la curiosa marca de 15 inscripciones por minuto durante los plazos abiertos para efectuarlas.
5. Alberto Revuelta 1.03:30
6. Kike Sebastián 1.03:52
9. Salaheddine Hmatou (MAR) 1.04:13
10.Elías Domínguez 1.04:18
1. Oihana Kortazar 1.14:45
2. Nerea Oñatibia 1.15:58
El más rápido entre los del atletismo adaptado fue el francés Joel Jeannot, en handbuki, y entre los cientos de patinadores Iñigo Birondo.
Algunos atletas salieron con camisetas inteligentes para controlar sus rendimientos y otros portaron las repartidas por la plataforma Stop Desahucios.